Transcripción del texto del cartel de la fotografía

El RINCÓN DEL SUFRIMIENTO REDENTOR

Dentro de la Parroquia de San Marcos, el altar y retablo central a la derecha según se entra y su entorno iconográfico, se podría llamar EL RINCÓN DEL SUFRIMIENTO REDENTOR.

En la parte inferior se contempla un CRISTO YACENTE con brazos articulados, obra escultórica que algunos atribuyen a la escuela de Gregorio Fernández (1576-1636). Es una sobredimensionada talla de madera policromada, y cubierta con un paño púdico de encaje que oculta piadosamente la masculinidad de la Humanidad Santísima del divino Redentor.

Hacia arriba, se contempla una copia de la SANTA FAZ. Este lienzo, según consta por la inscripción en el relicario de metal plateado con bajorrelieves, fue un regalo del papa Paulo V al cardenal Luis de Hodomay, que pasó a ser propiedad del Príncipe de Saboya. El lienzo lo depositó en San Marcos el último de sus capellanes. Recuerda el relicario aquel momento de la Pasión en el que la Verónica limpia el rostro afligido y ultrajado de Jesús. El Ángel que corona el retablo del siglo XVIII en su parte más alta presenta y sugiere piadosamente la misma escena de la pasión, mostrando en su derecha el rostro de Cristo impreso en un paño desplegado.

Ocupa el centro y parte superior del retablo la preciosa imagen de Nuestra Señora -la VIRGEN DE LA SOLEDAD-, talla en madera de Juan Pascual de Mena (1707-1784), en la que se observa el impresionante rostro doliente de la Señora.

El centro exterior está adornado por dos conjuntos de ángeles, probablemente obras de Roberto Michel (Le Puy-en-Velay, Alto Loira, 1740 - Madrid, 31 de enero de 1786) como tantas otras figuras de ángeles del mismo templo.