Cueva de Altamira
Pequeño reportaje fotográfico de algunas instalaciones y detalles del complejo de la Cueva de Altamira, incluido unos paneles luminosos del Museo de Altamira.
El acceso a la cueva original está extraordinariamente restringido al público y, además, no se pueden tomar fotografías en el interior.
Se incluyen imágenes de paneles luminosos de la evolución humana y de fauna de la época de las pinturas en la cueva, la senda que lleva a la Cueva de Altamira, el monumento a su descubridor y su hija, la placa memorial de la declaración de la Cueva de Altamira como Patrimonio Cultural de la Humanidad, el Centro de Conservación Altamira, la escultura «Quién!» en exposición temporal, la zona de talleres, la entrada al Museo de Altamira y los aparcamientos.
Al pie de esta página se transcriben algunos de los textos fotografiados.
Monumento a Marcelino Sanz de Sautuola Placa informativa Este monumento es un homenaje a Marcelino Sanz de Sautuola, descubridor de las pinturas rupestres de la cueva de Altamira junto a su hija María Justina en 1879. La escultura, fundida en bronce, fue realizada por el escultor Julio López Hernández, por encargo de la Fundación Botín en 1999, para que se reconociera el valor de su descubrimiento cerca de la propia cueva de Altamira. Inscripción A D. Marcelino Sanz de Sautuola, descubridor en Altamira (1879) de una de las primeras obras de arte de la Humanidad. |
Cueva de Altamira Placa de la senda de acceso La entrada de la cueva ha cambiado mucho desde los tiempos de Altamira hasta nuestros días. Durante la Prehistoria era similar a la que puede verse actualmente en la Neocueva. Esta gran boca, donde los habitantes de Altamira desarrollaban su vida cotidiana, se derrumbó hace 13 000 años. Desde entonces, la entrada permaneció totalmente sellada hasta su descubrimiento a finales del XIX. La estabilidad de su atmósfera interior ha favorecido la conservación de las pinturas durante milenios. La entrada actual fue construida en 1927 para facilitar el acceso de los visitantes. |
Memorial de la declaración como Patrimonio Cultural de la Humanidad Placa informativa Altamira, patrimonio mundial La cueva de Altamira fue inscrita en el Patrimonio Mundial de UNESCO en diciembre de 1985. La declaración reconoce Altamira como lugar de expresión artística única y portadora de información excepcional sobre civilizaciones magdalenienses del sur de Europa. En julio de 2008, el Comité del Patrimonio Mundial amplió la declaración de Altamira a otras 17 cuevas con representaciones artísticas paleolíticas del norte de España. Todas ellas constituyen un testimonio único del genio creador de los primeros Homo sapiens. Inscripción El comité del Patrimonio Mundial de la Unesco ha declarado LA CUEVA DE ALTAMIRA como Patrimonio Cultural de la Humanidad en su sesión del día 6 de diciembre de 1985. |
Escultura «Quién!» ...No es una pregunta, es una afirmación! Nosotros que rendíamos homenaje a la vida, conectándonos a la naturaleza, con respeto y admiración, trenzando cuentos y leyendas que dejamos plasmados en nuestras cuevas y que, hoy, lamentablemente no comprendemos. Yo, tú, ella, él, junto a ellas y a ellos, estamos aquí en este sitio tan especial y mágico, simplemente para reencontrarnos con nosotros mismos... Andrea Juan, Altamira, 2018
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