La baraja en Sandoval de la Reina
Ver también El Naipe
Bolsa de jugador no necesita atador.
(refrán recordado por Amonario Pérez, 19/01/2014)
«Dalas JR»: Durante muchos años se usó esta frase en Sandoval, dirigida al que tenía que repartir las cartas, bien directamente para agilizar la partida, bien para aclarar quién debía dar o porque se estaba retrasando en el reparto.
Tiene su origen en la popularísima serie de televisión "Dallas", pronunciado /'dalas/, que, con 357 capítulos, estuvo en televisión desde 1979 hasta 1991. Uno de los principales personajes protagonistas era el malo malísimo J.R. Ewing, conocido en la serie como JR y nombrado innumerables veces en los distintos capítulos.
Aun estos días de julio de 2017, hemos oído pronunciarla en una partida en el pueblo.
«Me cambio a OMO»: Esta es otra de las frases usadas jugando a la baraja, especialmente jugando al chinchorro, pero no solo.
Tiene su origen en algunos de los anuncios televisivos del detergente OMO. En esos anuncios una persona decía, ante la blancura de la ropa lavada con OMO, comparada con la suya: ¡Me cambio a OMO!.
Lo que quería decir el jugador es que, ante el panorama de que una jugada no parecía salirle bien, decidía cambiar a otra y lo pronunciaba en el momento de cambiarse. Por ejemplo, estaba intentando hacer un trío de caballos y, o no salían o salían fuera de su alcance. Entonces, tiraba uno de sus dos caballos e intentaba otra combinación, otro trío o escalera de tres. Y decía para reforzar o hacer patente su decisión «me cambio a Omo».
Esto era en los años 1970 y posteriores. Aun, hoy, en 2017, se puede oír esporádicamente.
Aquí vemos un video antiguo de OMO, si bien en él no se pronuncia la frase.
Es una frase que solía decirse, y aún se dice, mucho en Sandoval a un jugador que había hecho una mala jugada, por ejemplo, descartándose mal al mus y lamentándose de ello, o dejando de coger una carta al chinchorro que te venía de perlas:
- Ay, que me he equivocado de carta.
- Abrelojo está en Briviesca (dice el otro).Queriendo decir que abriera bien los ojos antes de hacer tales jugadas, 'fíjate bien en lo que haces'.
La cuestión es que no se conoce a ninguna persona llamada o apodada abrelojo, de Briviesca. Tampoco hay ningún pueblo con este nombre por allí ni en ningún otro lado. Además, no consta en los largos listados oficiales de topónimos españoles.
En la página del sitio condadodecastilla.es dedicada a la tercera Batalla de Pancorbo del año 882, hay un comentario de Evaristo Covaleda del 28/03/2020, que transcribe una corta poesía que nos podría dar una pista:
Desde cuando unos omeyas
iban a domeñar Pancorbo.
Abre el Ojo está en Briviesca
decía el maestro Heliodoro.
Cuando quieras resistir
pon de paje a un castellano
No tendrá un buen vestir
pero, será un caballero sano.
En el siglo IX las aceifas musulmanas, incursiones militares que los sarracenos solían hacer en verano en los territorios cristianos, fueron dirigidas un tiempo hacia los montes Obarenes, en los que se ubica el desfiladero de Pancorbo. Aquí las defensas cristianas eran mejores por lo abrupto del terreno. Briviesca, en el llano, a 24 quilómetros, era un lugar más poblado y próspero, pero bastante llano y poco defendible. Así que los habitantes de Briviesca tenía que estar con el ojo bien abierto (abrelojo) para, en cuanto se vieran venir las expediciones militares, dirigirse rápidamente a Pancorbo, donde estaban menos indefensos.
Es nuestra hipótesis sobre el origen de nuestro dicho.
Muy usado en el juego del chinchorro, parafraseando el lema de campaña de Felipe González para las elecciones generales de España de 1982: «Por el cambio».
Por el cambio, dijo Felipe, se decía y dice cuando uno ve que las combinaciones de cartas que tiene no terminan de salir o que tienen pocas posibilidades de lograrse o porque ha visto que ha salido una carta nueva que puede combinar bien.
Una cojonada es, en el pueblo, algo que resulta adverso.
En el juego de cartas del chinchorro, se exclama cuando uno roba carta del mazo y resulta inservible para el juego de uno:
¡Esto es la cojonada, cojo y no cojo nada!
Es un juego de palabras que combina cojo y nada, y expresa decepción en la jugada, resultando algo malsonante aunque inofesivo e informal.
Era y es una costumbre en Sandoval de la Reina sortear algunas situaciones con este sistema como el más imparcial.
Se barajean las cartas, se corta y se van dando sucesivamente los naipes entre los participantes, hasta que a uno le sale el as de oros que es quien gana el sorteo y lo que se sortee, o al que le toca lo que esté en cuestión.
Se ha utilizado, por ejemplo y varios años, para determinar quién se responsabiliza del bar de la Peña durante el mes de agosto.
Información: José Fuente (09/07/2017)