Motivo de la Misa de Gracias y Biografía de Manuel Ortega Carpintero
Manuel Ortega Carpintero nació el día 6 de febrero de 1779 en la villa
de Sandoval de la Reina. Fue bautizado el día 11 de febrero del mismo
año.
Su madre se llamaba Francisca Carpintero y murió el 13 de agosto de
1803. Su padre, Manuel Ortega, murió el 21 de abril de 1798.
Dejaron cuatro hijos: Tomás, Juana, Manuel y María.
El hijo mayor, Tomás, casó con su parienta María Castrorrubio, a quienes
dispensó de cuarto grado de consanguinidad el Papa
Pío VI,
en 1791. Tuvieron por lo menos dos hijas, María y Josefa Ortega
Castrorrubio. De éstas no se sabe si queda sucesión en el pueblo.
La segunda hermana, Juana, casó en 1794 con José González y fueron
padres por lo menos de Carlos González Ortega.
La hermana pequeña, María, que vivía soltera, en compañía de su hermano
Manuel Ortega al tiempo de la muerte heroica de éste, casó en 1820, a
los 34 años de edad con Victores López. Fueron padres, por lo menos, de
Luis López Ortega, que a su vez fue padre de Antonio López Sancho.
Hijos de Carlos González fueron Faustino, Mariano y Eulogia González
González.
Faustino casó con María Muñoz y tuvieron por hijos a Teófilo, Maura,
Macario, Saturnina y Eusebio González Muñoz.
Mariano, con Saturnina López, tuvo a Juana González.
Eulogia, con Gregorio Martínez tuvo a Cecilio Martínez.
Esta es la naturaleza de los descendientes indirectos de Manuel
Ortega que, a los 30 años de edad, el 24 de marzo de 1809, después
de recibir el sacramento de la penitencia y sin tener testamento, murió
en el término de
Las
Cárcavas, fusilado por los franceses como ciudadano español,
para librar a su pueblo y dar testimonio de amor con su propia sangre.
Varón lleno de Fe y de amor a España, se ofreció él mismo a morir para
que no castigaran a muchos, según había ordenado el jefe de las tropas
francesas que tenía su cuartel en Sasamón.
El pueblo, al verse libre, votó celebrar una misa a la Virgen del
Rosario en dicho día 24 de marzo, todos los años, para la salud del alma
de Manuel Ortega y para que conserven siempre en Sandoval la memoria del
sacrificio heroico de uno de sus más predilectos hijos, Manuel Ortega,
que practicó, hasta el heroísmo, el espíritu que siempre debe reunir el
pueblo para todo bien posible: Unos por otros y Dios por todos.
(caso agradable y curioso el recordar cada año al ofertorio de esta misa
los datos relacionados con Manuel Ortega Carpintero, terminado con el
rezo de un Padre nuestro, Ave María y Gloria por estas intenciones).
Figura la partida de defunción de Manuel Ortega
Carpintero en el folio 299 de un libro de número ilegible, que está
archivado en el arzobispado de Burgos. En él hay una indicación hecha
por un beneficiado del lugar en la que consta que fue fusilado por los
franceses y firma el que actuaba de párroco en aquella fecha, Don Juan
Antonio Martínez.
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