Vino Churro - Entrevistas
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Villasidro - Con un nonagenario y un octogenario
En Villasidro, charlamos con dos personas que prefirieron que no figurara su nombre y que nos dijeron cómo era el mundo del vino churro en su pueblo y de lo que queda. Fue el día 10 de mayo de 2017.
Ambos tienen parte de sus raíces en Sandoval de la Reina.
El nonagenario nos contó:
Antiguamente había viñas. Yo la tuve hasta que me cansé.
Aquí al vino se le llamaba «Churrillo». Era algo flojo. Todo de tipo Mencía.
Antiguamente había muchos majuelos (viñas), hasta el punto de que mi padre decía que antiguamente «se lo habían dado a los bueyes», tenían mucho. Después nosotros no hemos tenido tanto, cambiamos el cultivo. Los antiguos las vides las tenían de rastras, estilo antiguo.Hay alguno al que le queda algún majuelo; a este, por ejemplo, que acaba de pasar con el coche; la uva la vendimian él y un sobrino que tiene en la capital y hace algo de vino. Así que en Villasidro ya no se hace vino, quitando a ese, que vive en fuera, que hace un poco con uva de su majuelo.
Las mesas tenían la madera, el huso y esa tuerca grande. Había dos o tres. Quedaba una pero la desmontaron y la llevaron a Sasamón. Las otras mesas las dejaron en la calle a la intemperie. Aquí ya no encontrarás ninguna.
Aquellas mesas prensaban la uva con mucho tiempo; iba calcando la uva, cuando calcaba a darla otra vuelta (al menos entre tres personas o cuatro); luego a esperar a que calcara más.
Antes teníamos costumbre de ir a la bodega. Yo, ya con 90 años, ya no voy.
A la bodega llevábamos algo de casa, chorizo, cecina. Allí se pasaba el rato. Cuando matabas el chino se llevaba tocino de la careta, lo que tiene hebra. Ya se acabó aquello. Ahora los yernos cuando vienen van al banizo que tengo, que es una caseta, el merendero; los banizos están a la salida de la cueva [bodega subterránea], aunque no todas las cuevas lo tienen.
Hacíamos vino para todo el año y nos sobraba. Yo a lo último lo vendía a unos chicos solteros de la montaña, de Barrios de Villadiego.Respecto a otros tipos de vino, no se hacía ningún tipo con las pasas como en otros pueblos.
Sí hacíamos la «picarrasca» [también le llama «picarasca»]; consistía en que se echaba orujo [rampojos] en un pozal, se pisaba, lo dejabas fermentar dentro del pozal, hervir; luego lo bebías reciente, tenía un respe que le zumbaba el culo. Yo ya de eso no... pero los antiguos sí que bebían de eso. Luego tirabas el orujo. Lo bebían del pozal, que tenía una cañilla [también le llama canilla más adelante]; cuando hervía el orujo subía arriba y quedaba el vino abajo. A eso le llamaban picarasca. Al hervir, sustancia no tenía nada pero, ¡joder!, que se bebía bien.
Nosotros llevábamos el orujo a Lantadilla [a una fábrica de aguardiente]. A cambio nos daban unas botellas de orujo. Para que saldría más dulce ese orujo de Lantadilla lo hacías con andrinas.Nos comentó: También íbamos nosotros a la fiesta de Sandoval; había un banizo*; de gente que había dentro ¡salía un pavor por las ventanas! ['pavor' por 'vapor'], no se cabía.
Mi madre era de Sandoval.* Ese «banizo» estaba en la casa ayuntamiento.
Hablando con el octogenario:
En Villasidro, vino se hacía en general en todas las casas. Había viñedo de sobra. Vivíamos más en la bodega que en el campo. Íbamos por la mañana, a estas horas (13:30) y estábamos hasta las tres. Y después, desde las seis de la tarde, también íbamos a jugar allá, en el banizo. Había quien no tenía banizo e iba al de otro. Se jugaba al mus lo que más, a la treinta y una también.
Algún día se jugaba la merienda y el que perdía la subía por la tarde y si no otro día, la quedaba a deber.Ya no van quedando vecinos.
Este pueblo se va a ir a to... por cu..; jóvenes no hay ninguno, porque el que trabaja en el campo viene de Burgos, vive en Burgos.